–La fabricación de un crimen suele explicarse por la necesidad del autor para ocultar un delito mucho más grande. La investigación sobre el caso Ayotzinapa confirmaría este antiguo principio de las ciencias penales. Autoridades del más alto nivel manufacturaron un guion de ficción con el propósito, presumiblemente deliberado, de ocultar lo que realmente sucedió en Iguala, Guerrero, la noche del 26 al 27 de septiembre de 2014…