Es un número que porta mala suerte. Despierta furias y hace llover injurias, también arrasa con instituciones y trayectorias profesionales.Se trata del verdadero costo de la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAIM). Tan peligrosa es esta cifra que casi nadie se atreve a nombrarla. La última víctima de este conjuro cabalístico fue Gerardo Lozano Dubernard, director del Área de Cumplimiento Financiero de la Auditoría Superior de la Federación (ASF).Se trata del mismo funcionario que, el pasado mes de mayo, prestó un generoso servicio a quien no podía y que seis meses después terminó renunciando a su cargo acaso por haber concedido lo que no debía.En febrero de 2021, Lozano Dubernard firmó la Memoria del Proceso de Cancelación del NAIM (2014-2019). En dicho texto reconoció que el costo habría sido de 184 mil 600 millones de pesos.Semanas después sus coleg…