Un día como ayer basta para corroborar nuestra irredimible propensión a simular. En un país extranjero un jurado hizo lo que aquí no habríamos podido hacer.
Sin embargo, son hordas las que ahora se refieren al veredicto contra Genaro García Luna como si hubiese sido mérito propio.
Pero la realidad es necia y nos recuerda dónde vivimos. El mismo día en que se condenó al ex secretario de Seguridad un juez mexicano descongeló sus cuentas para que él y su mujer puedan disponer libremente de su dinero…