En la política mexicana ser acusado de traidor es solo cuestión de tiempo. Hoy, quienes presumen lealtad ciega son las mismas personas que pueden ser acusadas el día de mañana de desleales.
El solo desacuerdo de Monreal sobre qué hacer con los desacuerdos entre el oficialismo y la oposición lo convirtió velozmente en un traidor…