Cuando Alejandro Encinas llegó a la Subsecretaría de Derechos Humanos de Gobernación se comprometió a resolver este déficit. Emprendió para ello dos proyectos distintos:
La creación de un área dedicada al análisis de muestras humanas complejas, como las relacionadas con la búsqueda de los normalistas. Y el establecimiento de un laboratorio abocado a la identificación masiva de restos, algo que era urgente debido a la cantidad ingente de personas desaparecidas que hay en el país…