Ángel Juárez de 40 años fue detenido arbitrariamente por más de 30 policías en su casa, todos armados, entraron a la fuerza argumentando que tenían una orden de cateo, misma que jamás dejaron revisar.
Decían que había una denuncia de un iPhone robado, y que el GPS de ese iPhone, daba justo en su domicilio. Después del cateo sólo encontraron 2 teléfonos viejos en desuso y ese fue el motivo para llevárselo.
Su esposa, Carmen Prado, quedo con sus dos hijos, uno de ellos con capacidades diferentes y además sin casa, ya que quedo resguardada y clausurada, argumentando que encontraron droga.
Escucha el caso completo…