La expresión “abrazos, no balazos,” es una categoría hueca a la hora de explicar la política de “seguridad” del gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador.
Lo mismo sucedió en su día con la expresión “guerra contra el narcotráfico” atribuida a la gestión de Felipe Calderón. Ninguna de las dos refleja el conjunto de acciones emprendidas por la fuerza pública y sin embargo sirve para distraer sobre la reiterada incapacidad en la pacificación del país…